Historia de Benimàmet

No existen indicios de asentamientos humanos antes de la llegada de los musulmanes a la península. El primer asentamiento conocido en el territorio fueron los edetanos, pueblo prerromano que tenía su capital en la ciudad de Edeta (actual Liria). A pesar de la cercanía nada hace pensar que la zona estuviese bajo la influencia de los edetanos ni que hubiera ningún tipo de asentamiento.

A los edetanos (mal llamados iberos) les sucedieron los romanos, estos se establecieron y fundaron la actual ciudad de Valencia; durante la época republicana e imperial la vida la podemos definir como muy urbanita, solo en el ocaso del imperio y con la llegada de los visigodos los pobladores de la ciudad empezaron a emigrar al campo estableciendo un nuevo tipo de vida más rural. De época romana se han encontrado algunos restos y monedas a los pies de la conocida como Montanyeta del Polvorí, más o menos donde hoy día se encuentra la Feria de Muestras. A pesar de ello no ha sido posible determinar la existencia de grupos humanos en la zona.

La llegada de los musulmanes a la península en el año 711 supuso un punto de inflexión en la cultura hispana. En lo que concierne a nuestro territorio, la ciudad de Valencia, principal núcleo de población en la zona fue conquistada pacíficamente en el año 714 por tropas al mando de Tarik que pactó con el gobernador godo la entrega de la ciudad.

Será hacia el año 1238 cuando en el Llibre del Repartiment se cite por primera vez a Benimàmet en los libros de historia. En el citado “Llibre”, Jaime I el Conquistador hace entrega de casas, bienes y tierras propiedad de los musulmanes, a los hombres que le acompañan en la conquista del reino musulmán de Valencia, y Benimàmet es una de esas alquerías.

De lo dicho más arriba podemos inferir casi con toda certeza que Benimàmet nació a la historia con los musulmanes, siendo en origen una alquería musulmana. De este periodo islámico no se conserva constancia escrita alguna, pero es de suponer que los musulmanes ocuparían la zona hasta el siglo XIII, pero sin que podamos precisar el periodo de inicio de la ocupación. Estos primeros pobladores debían dedicarse principalmente a la actividad agrícola.

En este periodo islámico podríamos hacer un alto en el año 1093 cuando Rodrigo Díaz de Vivar (El Cid Campeador) conquista la ciudad de Valencia. Sin embargo esta conquista no tuvo porque suponer un cambio en las costumbres ni mucho menos en la población de nuestra primigenia alquería que continuaría con su vida normal, con la sola molestia de tener a un ejercito invasor a las puertas de tu casa. De cualquier modo El Cid muere en 1099 y su esposa Jimena solo logra mantener la ciudad con el apoyo de los castellanos hasta el año 1102 en que tiene que abandonar la ciudad y volver a Castilla. Valencia sería nuevamente regida por los musulmanes. No obstante aquí habría que hacer la salvedad que no podemos saber si en el siglo XI cuando el Cid campaba por sus respetos por Valencia, nuestra alquería originaria de Benimàmet ya existía o todavía no había sido ocupada la zona.

Sabemos por crónicas, que la actual Paterna se rindió a las tropas del rey Jaime I el Conquistador el 6 de abril de 1238 y que el propio rey estuvo en esta ciudad en un par de ocasiones. Dada la cercanía de Benimàmet a esta población es de suponer que ya para esta fecha la alquería de Benimàmet quedaría bajo control cristiano, unos meses antes de la conquista de la ciudad de Valencia que fue rendida el 28 de septiembre de 1238.

En el ya citado Llibre del Repartiment se cita por primera vez a Benimàmet con fecha 21 de agosto de 1238 (asiento 666, folio 41):

“Sancius de Stada, (Sancho de Estada) domos et hereditatem (de Mahomat de Almenaçat …) de Habraim Alfachar in Benimahabet. XII kalendas septembris.

En este apunte se hace constar la entrega a Sancho de Stada de unas casas y heredades (bienes) pertenecientes hasta entonces a Habraim Alfachar. Conviene advertir que la primera grafía utilizada es Benimahabet.

Sobre el origen del topónimo Benimàmet hay varias teorías. Vicente Coscollá gran conocedor del mundo musulmán valenciano hace derivar el nombre del prefijo “Beni” que quiere decir “propiedad” al que se le añade un nombre propio (antropónimo) que podría ser del dueño o señor de la alquería o casa de labor. Por tanto la significación del nombre de Benimàmet podría ser “propiedad de Mamet” o "propiedad de Mamud". El nombre propio de Mamud ya fue citado por el historiador valenciano Gaspar Juan Escolano en el siglo XVI.

De cualquier modo hay que hacer constar que el nombre propio Mamet o Mahabet en su primera acepción conocida sean corrupciones del nombre original ya que a los copistas cristianos del siglo XIII les costaba mucho traducir los nombres del árabe y los traducían a la fonética latina, es decir lo escribían tal y como lo oían pronunciar. Sin embargo podríamos afirmar que estos nombres no dejarían de ser más que variaciones a su vez del árabe “Muhammad” (Mahoma) que es el nombre del profeta en el mundo islámico.

Otra de las acepciones más conocidas y tal vez la más generalizada es la que traduce el prefijo “Ben” como “Hijo de” en lugar de “propiedad”, con lo que podríamos traducir el nombre como “hijo de Mamet”. El problema radica a mi entender que en la Comunidad Valenciana e incluso del antiguo reino de Mallorca existen muchas poblaciones con este prefijo y cuesta de creer que todas estos lugares sean llamados de una misma manera paterno-filial como si no hubiera más opciones. Me inclino más por la opción de considerar el prefijo “beni” con el sentido de propiedad, ya que los escribas latinos cristianos usarían tal acepción de una manera bastante indiscriminada para referirse a la propiedad de un musulmán, así utilizarían el prefijo Beni para referirse a la propiedad de Mahbit (Beni-Mahbit) que por cierto es otro de los nombres que se barajan para nuestra población (nombre propuesto por Carmen Barceló).

Continuando con nuestra historia, el 31 de enero de 1239 encontramos en el asiento 1062, folio 57 vto. el siguiente texto:

Açnar Periç de Alfaro, miles, in emenda de Xilet, X jovatas in alqueria de Benimabar et Rafasmateri et in Rafaljuare et in rahal Alfariti. II kalendas februarii.

En este segundo caso nos dice que Aznar Peris compra unos terrenos en la alquería de Benimabar. En este caso la grafía ha cambiado pero esta se complementa con los siguientes asientos transcritos también en el Llibre del Repartiment.

El 15 de abril de 1239 encontramos dos asientos más con los números 1117 y 1118 folio 61, que dicen así:

"Aznarius Petri de Alfaro, II kaficiatas terre in Campanar et II jovatas et mediam in Benitaha et (VII jovatas et II kaficiatas terrem) alqueriam de Benimahabar integram. Recognoscentes (vobis) quod consessimus (vobis) predictam alqueriam vobis daturam. III idus novembris et era M.CC.LXXVI nonas aprilis."

"Item damus vobis unam rotam in molendis quod est in predicta alqueria de Benimahabar.

En estos casos se hace entrega a Aznar Pedro de Alfaro de unos terrenos en Benimahabar y en el segundo caso de una muela de molino. En ambos casos la grafía vuelve a cambiar pero se acerca más a los anteriores nombres utilizados.

El 24 de Octubre de 1240 encontramos el asiento 1402 folio 74 que dice así:

“P.de Canamnas, unam jovatam terre in Benimabet, que fuit R.de Anguera. Et quia non fuit ad diem, revocamus et damus hec tibi, in emenda illus terre quam tibi dederamus in dicta alqueria. VIII kalendas novembris”.

En este asiento se hace entrega a Pere de Canyamàs o Pere Cannames de unos terrenos en Benimabet que habían sido entregados a Ramón D’Anguera.

Es Jaime I quien dona el lugar de Benimàmet a García Pardo quien se convierte en el primer señor de Benimàmet.

En 1277 Gil Martínez de Entenza (d'Entença) compra la alquería de Benimabar anexionándola a su señorío. Será en 1310 cuando se cite por primera vez en los textos el nombre de Benimàmet (tal y como hoy lo conocemos). En 1340 hereda el lugar Jaime Martínez de Entenza y funda en el Altar Mayor de la Iglesia, la invocación a San Vicente Mártir. Esta iglesia, más bien ermita tal vez pudo estar construida sobre la antigua mezquita musulmana y desde luego ocuparía el lugar que ahora ocupa nuestra iglesia de San Vicente Mártir.

En 1361 los descendientes de Entenza venden el señorío de Benimàmet a Berenguer de Codinats, "Mestre Racional de la ciutat de Valencia" y mayordomo del rey Pedro el Ceremonioso, por 80.000 libras reales. "El rey don Pedro de Aragón hizo escritura de donación a favor de Berengario de Codinach del tercio diezmo de Benimamet. En Valencia a 1 de abril de 1362". Berenguer de Codinats fallece en 1375 y hereda el señorío su hijo Bernardo de Codinats (jurado de la ciudad de Valencia en 1403). Berenguer de Codinats será enterrado en el coro del Convento de San Francisco de Valencia.

Uno de los descendientes de Bernardo de Codinats, Manuel Codinats contrae matrimonio con Leonor de Valterra, de cuya unión nace una hija: Beatriz de Codinats y Valterra que casa con Francisco Agustín Aguilón Romeu y que por matrimonio se convierte en Señor de Benimàmet. En 1453 el señorío es vendido por Francesc d'Agulló Romeu, esposo de Na Beatris Codinats Vallterra a don Lluís de la Cavalleria (de origen judío) familia procedente de Zaragoza muy poderosa en aquella época.

En el 1510 recibe en herencia el señorío de Benimàmet don Francisco Cavalleria que empieza a construir el castillo (castell) que se conservará en pie hasta después de la Guerra Civil Española (1936-1939).

En 1536 es elevada a parroquia la Ermita de San Vicente Mártir con pila de bautizar y cementerio. Se desgaja de la Iglesia parroquial de Burjassot de quien dependía hasta este momento. La parroquia de Benimàmet pasa a ser parroquia y rectoria de moriscos, siendo servida por un subvicario de Burjassot. "sia eregida en iglesia parrochial ab totes les insignies y hornaments necessaris [...] que sia dotada de esta manera [con] els delmes y la renda de les olim mesquites del dit lloc de Benimamet se aplique para la fabrica y ornaments de dita iglesia" (Archivo de la Catedral de Valencia. Leg.1626).

Extinguida en 1549 sin descendencia directa la familia Cavalleria, sus herederos venden hacia 1555 el lugar de Benimàmet a don Baltasar Ince de San Juan (Baltasar Jure de Sanjuan), pero su hijo Fernando perdería la propiedad por sus muchas deudas, adquiriéndolo Miguel Juan de Tallada. El 16 de Noviembre de 1588 el Monasterio de San Miguel de los Reyes compra el lugar de Benimàmet, siendo prior en ese momento, el padre Fray Francisco de Santa María. La Real Audiencia de Valencia autoriza la compra de Benimàmet y de la alquería de Benitaha por 22.000 libras.

El 22 de septiembre de 1609 fueron expulsados los moriscos de Benimàmet al igual que en el resto de la Corona de Aragón. Habían entonces 21 casas de cristianos viejos y 31 casas de moriscos. Benimàmet sufre un gran descenso en la población, siendo posteriormente repoblada con gentes del Pirineo Aragonés y de Huesca.

Ante el aumento de la población de Benimàmet, hacia 1656 comienza la construcción de un templo parroquial de nueva planta, para esta fecha consta la donación que hizo el monasterio de un retablo con destino a la Iglesia parroquial de Benimàmet que se había construido. En 1700 consta que las obras proseguían en la ampliación del sagrario.

En 1676 es ampliada la iglesia para dar cabida a los nuevos repobladores cristianos. La fecha de ampliación la podemos leer en un grafiti del muro de la iglesia recayente a la calla Titaguas. En el se lee: Esto es del año 1676.

En 1745 la Audiencia de Valencia corta de raíz las pretensiones del lugar de Benimàmet de separarse de la jurisdicción de San Miguel de los Reyes. En 1784 el señor de Benimàmet, fray Francisco de Santa Bárbara (Monasterio de San Miguel de los Reyes) realiza un libro manuscrito sobre Benimàmet, donde hace constar, la población, los señores del lugar y las contribuciones.

Durante la Guerra de la Independencia, los soldados franceses del general Reille ocupan Benimàmet y se instalan en la población. La iglesia parroquial es convertida en caballeriza. Como hecho anecdótico podemos decir que fue el párroco de Beniferri el franciscano Juan Martí quien alza el grito de independencia en Benimàmet y Beniferri.

El 11 de Octubre de 1835, como consecuencia de la Desamortización de Mendizabal, Benimàmet obtiene la independencia municipal, constituyéndose en pueblo, pero el 9 de Julio de 1882 Benimàmet es anexionada a la ciudad de Valencia, quedando relegada a la condición de pedanía tras 47 años de independencia municipal.

El texto de la anexión dice así:

Ministerio de la Gobernación
Real Decreto

De conformidad con lo dispuesto en el articulo 10 de la ley municipal vigente, y del informe del Consejo de Estado, a propuesta del Ministro de la Gobernación. Vengo a decretar lo siguiente

Articulo 1º Se suprime el Ayuntamiento de Benimàmet en la provincia de Valencia y se agrega su termino al de la capital.

Articulo 2º El Ministro de la Gobernación dara cuenta a las Cortes del presente decreto.

Dado en Palacio a 9 de Julio 1882.
Alfonso (anotación del autor: Alfonso XII)

El Ministro de la Gobernación
Venancio González

Por ser de justicia citaremos a algunos de los vecinos que consiguieron con su tesón y esfuerzo que Benimàmet fuera pueblo. Sus nombres son los siguientes: Cayetano López, José Fabra, Valero Monzó, Vicente Ros de Visins, Vicente Peris, Tomás Hueso, José Ferrandis, Rafael Barrachina, Agustín Miralles, Jaime Valls, Silvestre Calatrava, Francisco Llovat, José Blat, Domingo Burguete, Sebastián Pons, Pascual Oficial, Francisco Agustí, Ramón Benlloch, Francisco Viu, Manuel Brisa, José Martinez, Joaquin Belenguer, Vicente Soriano, Luis Casani, Cayetano Agrait y otros muchos.

En 1850 el diccionario geográfico de Pascual Madoz ya menciona tres barracas o alquerías denominadas de Mosen Povo y unas 15 cuevas conocidas con el nombre de Camales (que desaparecerán en el año 1976 al construirse sobre ellas el actual Parque de Camales).

En 1883 y con la reciente incorporación de Benimàmet a Valencia, llega al pueblo el alumbrado público por gas y en el mes de mayo de 1908 lo hace el alumbrado eléctrico.

En 1885 tiene lugar una epidemia de cólera en Benimàmet, según cuentan y gracias a la intercesión de San Francisco de Paula, la misma se termina. De este hecho milagroso nacería la devoción por el santo, creándose en 1886 la fiesta de San Francisco de Paula.

El proyecto de ferrocarril económico de Valencia a Liria, será redactado por Alejandro Barber en 1887 para la Sociedad Valenciana de Tranvías y será el inicio del desarrollo urbanístico de Benimàmet. Será el 18 de julio de 1888, cuando se inaugure la línea ferroviaria (el trenet) entre Valencia y Liria, con parada en Benimàmet. En 1889 Benimàmet ya cuenta con estación propia. Esta se sitúa en las afueras del casco urbano (actual plaza Luis Cano) y con la llegada del ferrocarril comienza la llegada de veraneantes que buscan un clima más fresco y saludable que el que pueden encontrar en la ciudad. En 1945 se construirá el apeadero de Carolinas. En 1987 la gestion del ferrocarril de via estrecha empezó a ser gestionada por la FGV.

A finales del siglo XIX las religiosas trinitarias fundan un colegio para niños en la calle Párroco Miguel Tarín, número 13.

A principios del siglo XX se fundan numerosas asociaciones entre ellas La Hermandad de Labradores y la Sociedad de Colombicultores. Se construye además el Colegio Público en la plaza del doctor Ximeno, edificio hoy convertido en Ayuntamiento pedáneo.

En 1914 se inauguran las Escuelas del Ave María, en principio como colegio para niñas pobres.

Es a partir de 1920 y hasta prácticamente 1940 cuando Benimàmet empieza a recibir gentes que procedentes de Valencia, construyen una segunda residencia para pasar el verano. De estas dos décadas es cuando se construyen los chalets que todavía se conservan en la parte alta de la actual Felipe Valls. Durante la Guerra Civil, Benimàmet también se convierte en lugar de residencia de muchas familias que prefieren estar alejados de la ciudad ante la posibilidad de bombardeos indiscriminados sobre la capital.

El 27 de mayo de 1921 tiene lugar la apertura de la Sociedad Instructiva del Obrero Agrícola Musical (Casino Cervantes). En este edificio podemos encontrar el actual teatro en el cual ocasionalmente se hacen diversas representaciones de tipo cultural: obras de teatro y conciertos de música principalmente.

En el año 1922 consta además la existencia de una ermita dedicada a San José atendida por religiosas trinitarias descalzas que además daban clases a niños pobres. No hemos sabido determinar el lugar exacto de la ubicación de dicha ermita pero sin lugar a dudas la misma se encontraría en el actual barrio de Carolinas. De esta ermita ya se hacía eco Pascual Madoz en su diccionario geográfico valenciano editado en 1850.

El 2 de agosto de 1936, al inicio de la Guerra Civil, la iglesia es incendiada quedando completamente destruido el interior de la iglesia y todas sus imágenes. Algunos libros eclesiásticos se consiguen salvar de las llamas. En el informe emitido después de la guerra (marzo de 1939), por el cura párroco don Miguel Baldó a petición del Arzobispado, este elabora un informe que dice: Los libros del archivo parroquial han sido destruidos todos, menos los libros de bautismos desde el año 1908-1928; los de matrimonios menos desde el año 1916-1936; y los de defunciones menos desde el año 1892-1936.

El 9 de julio de 1992 se inaugura el escudo de Benimàmet sito en los jardines de la Plaza Luis Cano y en 1995 lo sería el Ambulatorio, que hasta entonces había estado instalado en un bajo de la calle Felipe Valls y posteriormente en el actual edificio del ayuntamiento de Benimàmet.

En octubre de 1996 nace la Comisión promotora del Nuevo Municipio de Benimàmet, cuyo objetivo es conseguir la segregación de la ciudad de Valencia y que Benimàmet pueda constituirse como pueblo independiente. El objetivo no se ha podido cumplir.

A mediados del año 2007 comienzan las obras para el soterramiento de las vías del metro (antiguo ferrocarril de via estrecha) que separaba Benimàmet en dos zonas. En 16 de mayo de 2011, cuatro años después las obras han finalizado y el metro pasa subterráneo por la población.

Crecimiento de la población:

El casco antiguo de Benimàmet surge creciendo a lo largo de dos caminos:

El Camí Vell de Paterna que desde Beniferri corría por las actuales calles de Bernardo Prieto (calle Valencia), Plaza de la Tienda, Titaguas (calle iglesia), Plaza doctor Ximeno (Plaza de la iglesia) y Párroco Cobos (calle Paterna) y que desembocaba en la Plaza de Camporrobles (Plaza de la Creu). En la plaza de la Cruz el camino convergía en un segundo camino que tenía como punto de inicio Burjassot. Desde la plaza de la Cruz y considerando que la misma marcaba el límite del término municipal el camino continuaba hasta Patena atravesando el barranco de Endolza.

El segundo camino era el conocido como Camí de Burjassot y discurría partiendo de Burjassot por las calles Rafael Tenes Escrich (calle Burjassot), la Plaza de Alborache (Plaza del Calvari) y por la calle Carpinteros para desembocar también en la Plaza de la Creu. En esta plaza convergía con el Cami Vell de Paterna y continuaba hasta Paterna.

Al igual que ocurre con otros puntos de Valencia, la cruz de piedra de esta plaza marcaba el fin del termino municipal, por lo que se trata de una cruz conocidas como de término.

Será por tanto en este conjunto de calles donde se constituya el núcleo primitivo del pueblo (Poble Baix), que con el discurrir del tiempo y el aumento de la población, iría ampliándose hacia la parte alta del pueblo en dirección hacia la actual Feria de Muestras. A esta zona de expansión de carácter residencial que tradicionalmente venía marcada por la cicatriz que formaban las vías del trenet se le solía denominar Poble Alt.

Datos estadísticos
Censos de población:

1787 1.080 habitantes (Censo de Floridablanca)
1794 1.300 habitantes (280 casas) según Cavanilles
1850 1.170 habitantes (248 casas) según Pascual Madoz
1910 2.162 habitantes
1920 2.845 habitantes
1930 3.234 habitantes
1940 6.747 habitantes
1950 9.728 habitantes
1960 8.615 habitantes
1970 10.279 habitantes
1975 10.948 habitantes
1981 11.825 habitantes
1983 12.283 habitantes
1985 12.413 habitantes
1990 12.025 habitantes

De los anteriormente expuesto, aunque los datos son muy fragmentados, podemos ver que el aumento de la población ha sido constante. La excepción se da en el censo de 1960 donde la población baja, pero ello es debido a la mala confección de los censos electorales de la época ya que dejaron sin censar a parte de la población de la zona de Carolinas.

A continuación relacionamos el censo de habitantes de Benimàmet-Beniferri según el Instituto Nacional de Estadística (INE)

Censo según I.N.E
año
hombres
mujeres
total
2000
5.999
6.299
12.998
2001
6.103
6.379
12.482
2002
6.216
6.403
12.619
2003
6.255
6.463
12.718
2004
6.392
6.577
12.969
2005
6.675
6.826
13.501
2006
6.841
6.970
13.811
2007
6.850
6.999
13.849
2008
7.012
7.130
14.142
2009
7.062
7.216
14.278
2010
7.047
7.281
14.328
2011
6.945
7.254
14.199
2012
6.935
7.239
14.174
2013
6.901
7.252
14.153
2014
6.820
7.196
14.016
2015
6.802
7.157
13.959
2016
6.813
7.167
13.980
2017
6.781
7.159
13.940
2018
6.826
7.172
13.998
2019
6.954
7.409
14.363
2020
7.066
7.495
14.561
2021
6.990
7.412
14.402
2022
7.023
7.458
14.481
2023
7.110
7.616
14.726

De los anteriores censos de población vemos claramente que el aumento de la población ha sido lento pero constante hasta el año 2010, siendo que a partir de esta fecha la tendencia es a la inversa, un descenso de la población lenta pero constante. Esta tendencia se vuelve a invertir a partir del año 2018 en que el total de población vuelve a subir aunque muy lentamente. También de los datos se infiere que aunque tanto el número de hombres y mujeres están a la par, hay un ligero porcentaje de mayoría de mujeres que de hombres. De los datos expuestos también podemos decir que en el último censo realizado en 2023, Benimàmet-Beniferri alcanza el mayor número de habitantes de toda su historia.