Apeaderos de tranvías zona marítima de Valencia
Rotonda de Caro y Rotonda de Levante

A finales del siglo XIX empezó a ponerse de moda en los meses de verano, los baños de mar. Los valencianos empezaron a acudir a los poblados marítimos para pasar unos días de playa, en nuestro lenguaje actual. En sus comienzos el transporte a las zonas de baño se hacía en carruajes, carros o tartanas de alquiler tirados por caballos. Al mismo tiempo y en 23 de junio de 1876 se puso en marcha el primer tranvía, también con tracción animal; una de las líneas cubría el trayecto Valencia al Grao y Cabanyal. La disponibilidad de un transporte público por escaso y rudimentario que fuera, ponía al alcance de muchas más personas por un módico precio, el viaje hasta las zonas de baño. De todos modos solo la gente adinerada o la burguesía valenciana podían permitirse los caprichos de los baños de mar, la gente trabajadora no podían disponer de estos lujos.

En 1898 la Compañía General de Tranvías Eléctricos, apodada la lyonesa por estar su sede principal en Lyon (Francia), comenzó la electrificación de la ruta Valencia al Grao y además pudo explotar en solitario el servicio de tranvías en casi toda la ciudad. En 24 de marzo de 1900 tuvo lugar la inauguración del servicio eléctrico de tranvías Valencia al Grao.

Rotonda de Levante La primera rotonda es la conocida como rotonda de Levante llamada así, por estar situada en la playa de Levante. La rotonda permitía enfilar el camino de vuelta hacia la ciudad, sin necesidad de efectuar ninguna maniobra extraña. En el centro de la rotonda se levantó una marquesina de planta hexagonal y con cubierta de mimbre. Unos bancos bajo la rotonda, permitían el descanso momentáneo en tanto se esperaba la llegada del tranvía. Las instalaciones no tenían mingitorios (meaderos) motivo por el cual, en 1931 se abrieron unos sanitarios para tales necesidades.

La playa de Levante fue famosa por situarse en ella, muchos de los restaurantes, merenderos y barraquetes más icónicos de la costa valenciana: el Globo, la Estrella, la Cesta, Rosaura y el Ferrocarril entre otros muchos.

Rotonda de Caro La segunda rotonda, la más conocida, más importante y más representada, llevaba por nombre rotonda de Caro, estaba en el muelle de Poniente, en la zona sur del puerto. Tomaba su nombre por el paseo de Caro donde se situaba, paseo cuyo nombre todavía figura en el callejero. Prácticamente estaba en la desembocadura del río Turia, cerca de Nazaret, frente a la actual casa cuartel de Cantarranas y cercano al actual edificio de la Comandancia Naval de Marina.

En el centro de la rotonda se levantó una marquesina o quiosco. Fue obra del ingeniero Carlos Blanco e inaugurada en 1910. De planta poligonal, de cuatro de sus lados sobresalían cuatro cortas naves que conformaban una planta en cruz griega. El conjunto con un diámetro de 29 metros y una altura de 15 metros estaba realizado en hormigón y madera. La marquesina fue desmontada en 1933 ante el peligro que suponía su mal estado de conservación.

Este apeadero fue famoso, ya que en sus cercanías se encontraban los merenderos y restaurantes más importantes de la ciudad en época estival. Fue famoso un restaurante o quiosco llamado Chantecler situado en el centro de la rotonda y que al decir de la época era uno de los mejores. En las cercanías se situaban distintos locales: Baños de la Florida, inaugurada en este lugar en 1908 y la Estrella, ambos muy conocidos por encontrase en el interior del mar. Otro restaurante muy famoso fue el Ostrero de Miguel Collado, pabellón también situado en el interior de las aguas y famoso por servir pescado y marisco de sus propios criaderos. Otro restaurante también muy conocido fue la Rosa del Turia (1868).