Las siete maravillas del mundo moderno
Cristo Redentor o Cristo de Corcovado

Se trata de una gigantesca escultura de 30 metros de altura que se alza sobre el Monte de Corcovado en la población brasileña de Río de Janeiro. La figura de Cristo vestida con una larga tunica y con los brazos extendidos domina la población y la bahía de Río desde el 12 de Octubre de 1931 en que fue inaugurada. Se eleva a 710 metros de altitud sobre el nivel del mar. El nombre de Río de Janeiro, obedece a que el navegante portugués Gaspar de Lemos entró por primera vez en la bahía (río) en el mes de enero (janeiro) de 1502, tomando posesión del territorio en nombre de Portugal.

El Cristo de Corcovado es una escultura art-decó realizada en hormigón armado de 30 metros de altura (de pies a cabeza), más ocho metros de pedestal, realizada entre 1926 y 1931 por el escultor francés Paul Landowski (* Paris 01-06-1875 † Boulogne-Billancourt 31-03-1961). Con Landowski trabajó el escultor rumano Gheorghe Leonida (* Galati-Rumanía 1892 † Bucarest 1942) que se encargó de esculpir el rostro del Cristo Redentor. En total pesa cerca de 1.200 toneladas. El diseño es obra del brasileño Heitor da Silva Costa (* Río de Janeiro 25-07-1873 † 21-04-1947). La escultura fue realizada parcialmente en Francia y transportada hasta Río donde eran ensambladas las piezas en la misma cima del monte.

El interior de la escultura es hueco y en su interior solo encontramos una escalera metálica que lleva por el interior de la estructura hasta la parte alta de la misma. Tiene dos salidas en cada uno de los brazos y una quinta por la cabeza. El acceso al interior está prohibido y solo es practicable para el mantenimiento de la estatua o para visitas muy especiales. En la parte alta de la cabeza tiene una especie de corona metálica no visible desde abajo que simula una especie de corona de espinas pero que en realidad se trata de pararrayos. También dispone por la parte superior de sus brazos de dos protecciones metálicas que al igual que la corona hacen funciones de pararrayos. En el pecho del Cristo podemos ver el Sagrado Corazón de Jesús.