Esta historia está sacada de la mitología griega, y narra el porqué dio comienzo la guerra de Troya. Se cuenta que el hecho tuvo lugar en el
banquete de bodas entre Tetis y Peleo. Eris, diosa de la Discordia, enfadada por no haber sido invitada a la boda
entregó una manzana de oro para que fuera entregada a la diosa más hermosa del Olimpo. El
titulo se lo disputaban Atenea, Hera y Afrodita, pero nadie quisó ser arbitro de la discordia, por lo que Zeus encargó a Hermes que guiara a las
diosas hasta el monte Ida para que Paris hijo del rey Priamo de Troya, dilucidara el juicio.
Puesto en antecedentes, las diosas ofrecieron cada una un obsequio a Paris si este la elegía. Hera le prometió todo el Imperio de Asia, Atenea le
ofreció la prudencia y la victoria en todos los combates y Afrodita le prometió el amor de Helena de Esparta que era considerada como la mujer más
bella entre las mortales. Paris entregó la manzana de oro a Afrodita y la diosa le entregó lo prometido.
Paris, de visita a Esparta, fue recibido hospitalariamente por Menelao y Helena, Paris raptó a Helena y se la llevó a Troya aprovechando que
Menelao estaba fuera de la ciudad.
El problema radicaba en que Helena estaba casada con Menelao, rey de Esparta y cuando tuvo conocimiento, que Paris y Helena habían huído a Troya,
organizó un potente ejercito y se dirigió a Troya para recuperar a su esposa y castigar a Paris. Con este acto dio comienzo la Guerra de Troya y
de esta, la famosa historia del caballo de Troya.