La Virgen, El Niño, un Santo y un Ángel
Andrea d'Agnolo del Sarto

TITULO La Virgen, el Niño, un santo y un ángel (1522)
TÉCNICA Óleo sobre tabla, 177x135 cm.
AUTOR Andrea d'Agnolo "del Sarto" (1486-1530)
Pintura italiana s. XVI

Esta espléndida tabla, también conocida como Madonna della Scala, es un ejemplo visible del lenguaje del clasicismo florentino de Andrea del Sarto. A partir del inventario de Carlos I de Inglaterra, que consideraba la figura de la izquierda como San Juan, se ha especulado que el tema de la tabla podría ser la Consagración del Apocalipsis, y que el ángel representaría la confirmación de la profecía de la Pasión y estaría leyendo al Niño el Antiguo Testamento. De ahí la angustia reflejada en el rostro de la Virgen y la escena del fondo.

Sin embargo, ciertos historiadores identifican la figura de la izquierda con Tobías y la de la derecha con el arcángel Rafael, interpretando por lo tanto el gesto del Niño como una afirmación del Libro de Tobías. Esto permite suponer que Sarto se podría haber inspirado en una obra de Rafael, La Virgen del Pez (Museo del Prado), que desarrolla el mismo tema.

Otras veces se ha pensado que el santo fuera San Mateo, patrono de los banqueros, porque, según Vasari, la obra fue encargada por un banquero florentino. Del evangelio de San Mateo deriva el Protoevangelio de Santiago, texto apócrifo que relata el episodio de Santa Isabel y San Juan Bautista huyendo de la persecución de Herodes contra los inocentes, lo que ayudaría a explicar la escena secundaria.

En un inventario de 1857 se define la pintura como una Sagrada Familia -la Virgen, el Niño y San José-, interpretando la figura del ángel como el mensajero que viene a avisarles de las intenciones de Herodes. La escena se desarrolla sobre un paisaje montañoso, en el que se aprecia, en la lejanía, una ciudad amurallada característica de la Toscana, en clara alusión a Jerusalén.

Las figuras principales ocupan todo el espacio del primer plano, definen un esquema piramidal y crean una armoniosa y elegante relación rítmica entre ellos. Sarto realizó numerosos dibujos preparatorios, elaborando minuciosamente todos los detalles hasta conseguir la perfección compositiva patente en esta tabla. Esta pintura se encuadra dentro del clasicismo, y es deudora de Leonardo, Rafael y también de Miguel Ángel -en el doble contraposto de la Virgen en relación al Niño y en la monumentalidad de sus figuras-, pero con elementos que presagian ya el manierismo. Las tonalidades empleadas por Sarto anuncian ya las posteriores gamas utilizadas por los pintores manieristas. Vasari, en sus Vidas de artistas, cita esta obra como un encargo del banquero florentino Lorenzo di Bernardo Jacopi.

En 1605 fue adquirida por el duque de Mantua, Vicenzo Gonzaga, y en 1627 pasó a poder de Carlos I de Inglaterra, en cuya almoneda fue comprada, en 230 libras, por el coronel William Wetton. Éste la vendió en 500 libras a don Alonso de Cárdenas para don Luis Méndez de Haro, quien se la regaló a Felipe IV. Velázquez la depositó en la sacristía del monasterio de El Escorial.Finalmente en 1819 ingresó en la colección del Museo del Prado.

La tabla está firmada en la segunda grada con el monograma del artista.

Texto y foto: http://museoprado.mcu.es